Las rosas del jardín de Adonis amo.
Las rosas del jardín de Adonis
Son las que yo amo, Lydia, esas efímeras rosas
Que en el día de su nacimiento,
En ese mismo día, mueren.
La luz es eterna para ellas, pues
Nacen con el sol cuando ya ha salido, y se acaban
Antes que Apolo pudiera incluso iniciar
Su trayectoria visible.
Como ellas, déjanos hacer de nuestras vidas un día,-
Voluntariamente, Lydia, desconociendo
Que existe la noche antes y después
El poquito que perduramos.
En ese mismo día, mueren.
La luz es eterna para ellas, pues
Nacen con el sol cuando ya ha salido, y se acaban
Antes que Apolo pudiera incluso iniciar
Su trayectoria visible.
Como ellas, déjanos hacer de nuestras vidas un día,-
Voluntariamente, Lydia, desconociendo
Que existe la noche antes y después
El poquito que perduramos.
Para ser grande, sé entero.
Para ser grande, sé entero:
nada tuyo exageres o excluyas.
Sé todo en cada cosa. Pon cuanto eres
en lo mínimo que hagas
Por eso la luna brilla toda
en cada lago, porque alta vive.
Sé todo en cada cosa. Pon cuanto eres
en lo mínimo que hagas
Por eso la luna brilla toda
en cada lago, porque alta vive.
Ambos poemas representan a la perfección la filosofía de Fernando Pessoa.
ResponderEliminarEn el primero , nos sugiere que la vida dure un día utilizando la metáfora de la vida de una rosa, lo cual podríamos asociar con el poema de Bécquer, que al igual que Pessoa compara la vida con lo que dura un rayo.
Algo que me llama la atención de este poema es que la voz poética vuelve a estar dirigida a Lydia.
El segundo poema sin duda me ha encantado, me gusta esa filosofía de Pessoa de dar lo máximo de ti en todo lo que hagas, de esforzarte ,... hay que hacer cosas relevantes, moverte , porque la vida pasa muy rápido y hay que aprovecharla.
Sin embargo me llama la atención porque se contrapone totalmente a la visión de la contemplación que nos da en "Ven a sentarte a mi lado..", en la cual nos invita a mirar pasar la vida..
Entonces,..¿qué debemos hacer querido Pessoa, mirar pasar la vida , contemplarla o aprovecharla , vivirla ,experimentarla?
En el primer poema, el autor aborda el tema de la fugacidad de la vida y defiende que hay que vivirla como si cada día fuera el último. Para expresar esta fugacidad, emplea como ejemplo la vida de una flor, que termina el mismo día que empieza. A continuación, habla de las distintas percepciones del tiempo para las distintas personas. Por ejemplo, como dice, para las flores la luz del sol es eterna, porque nunca llegan a ver el sol ponerse. Al igual que las flores, que no saben que al final del día morirán, y viven su corta vida sin ser conscientes de ello, de igual modo nosotros debemos vivir cada día como si fuera el único sin saber cuando se acabará. Sin embargo, no con esto quiere decir que no pueda ser el prototipo de vida tranquila y armoniosa que siempre defiende.
ResponderEliminarEn el segundo poema defiende que debemos dar el máximo de nosotros mismos en todo lo que hagamos. Aquel que es bueno en lo que hace, es porque se esfuerza y lo intenta hasta que lo consigue.