miércoles, 18 de mayo de 2016

4.1 Características de la narrativa del siglo XX

…………………4.1Tema Pau Características de la narrativa del siglo XX: narrador, punto de vista, tiempo y espacio, escenario, personajes.

El siglo XX arranca con un deseo profundo de innovar las técnicas literarias, una vez que el realismo del siglo XIX (incluido el realismo ruso de Dostoievski) se muestra agotado. Esta renovación coincide con las llamadas “vanguardias” (años 20) y los autores que marcarán tendencia y abren nuevos caminos son unos pocos, de entre los que destacamos a : Marcel Proust, James Joyce, Faulkner, Virginia Wolf y, por supuesto kafka. Estos nombres –y algún otro- nos servirán de guía para destacar las nuevas técnicas que aún hoy perduran en la novelística más arriesgada Se origina una novela que pretende dar cuenta del caos, a partir de una gran renovación de las técnicas narrativas: se multiplican los puntos de vista, empleo del monólogo interior, saltos cronológicos, ausencia de un argumento claro y cerrado …

Marcel Proust (1871-1922) Es uno de los escritores modernos que más ha influido en la novelística posterior. Su gran aportación es en haber explorado los mecanismos de la “memoria involuntaria”, es decir la necesidad de recuperar el pasado minuciosamente (por entonces estaba de moda un filósofo de la memoria: Henry Bergson, a quien Proust seguía). Escribe en siete novelas su magna obra A la busca del tiempo perdido (1919-1927)y es famoso el detonante que la provoca (episodio conocido como “la magdalena de Proust): el olor de una magdalena mojada en el té le retrotrae al tiempo lejano en que su tía-abuela le daba tal merienda. En A la busca .. evoca con detalle las peripecias vitales y sentimentales del protagonista y de la sociedad burguesa y aristocrática que le rodea Llama la atención en la obra la descripción demorada de los objetos, la profundización en la caracterización de los personajes, la incorporación de sensaciones y recuerdos y la inclusión de reflexiones sobre el arte, la muerte, el dolor, el amor, el paso del tiempo… En cuanto a la forma, destaca la complejidad estructural: se producen rupturas temporales, fragmentarismo en la caracterización de los personajes y el empleo de oraciones largas y complejas, que dificultan la lectura de la obra.

James Joyce (1882-1941) Ulises(1922), su novela fundamental, viene a ser modelo de todas las técnicas narrativas del siglo XX. La novela transcurre en un solo día y apenas tiene argumento: Leopold Bloom, que conoce las infidelidades de su mujer Molly, se encuentra con Dedalus con el que irá a un burdel y al que invitará después a su casa. Molly, en un monólogo interior, recordará detalles de su vida y el episodio erótico de ese día. Concebida como el reverso de la Odisea, Leopold Bloom sería el nuevo Ulises, ahora no un astuto y valiente héroe, sino un vulgar empleado; la fiel Penélope se ha convertido en la infiel Molly; y el hijo de Ulises, Telémaco, estará representado por Dedalus. La mediocridad del ambiente y de los personajes refleja cómo nuestra civilización ha convertido en vulgaridad la grandeza de los héroes antiguos. - Entre los rasgos innovadores destacan: • Empleo del monólogo interior sin ningún tipo de puntuación. • Fluyen sentimientos, sensaciones y diálogos de los personajes, que a veces se confunden con la voz narrativa. • Desorden cronológico y mezcla realidad e imaginación. • La narración presenta diferentes registros (desde lo más culto a lo más vulgar), y citas de todo tipo (latinas, litúrgicas, literarias …).

 Kafka (1883-1924) fue un escritor checo miembro de la minoría judía de lengua alemana, cuya desasosegadora y simbólica narrativa, escrita en alemán, anticipó la opresión y la angustia del siglo XX.. La fuerza de su obra ha sido tan importante que el término kafkiano se aplica a situaciones sociales angustiosas o grotescas. Un escritor definió su estilo “Etéreo como un sueño y exacto como un logaritmo”. Con esta aparente paradoja recoge bien el espíritu de Kafka: esa mezcla de extrañeza y exasperante cotidianeidad El resultado es que, a través de su visión, nuestro mundo común se revela en lo que tiene de absurdo a la vez que en lo que tiene de excesivamente organizado, pues Kafka lo describe todo con pleno realismo, tal como solemos encontrarlo en la cotidianidad más vulgar, pero, a la vez, como vivido en un sueño donde ocurren las cosas más tremendas, las que ni siquiera llegábamos a formular. Esa extrañeza la analiza muy bien nuestro escritor español más kafkiano, Enrique Vila-Matas en lo que denomina “la extraña plataforma de la vida”. En su mejor relato La metamorfosis (1915). Gregorio Samsa, el protagonista, un voluntarioso agente de seguros, descubre al despertar una mañana que se ha convertido en un enorme insecto; su familia lo rechaza y deja que muera solo. Es un ajuste de cuentas con la familia a la vez que fábula del desamparo humano Muchos autores siguieron su estela.

 Un caso singular es el italiano Dino Buzati (1906-19729) con El desierto de los tártaros (1949), o , J. M. Coetzee con Esperando a los bárbaros.(2003) Virginia Woolf (1882-1941) es maestra absoluta del “monólogo interior”. En La señora Dalloway (1925)se mete en la conciencia de una mujer madura durante un día de su existencia. En Las olas (1932) podríamos hablar de monólogo poético, con tintes oníricos, en ocasiones surrealistas

Esta misma destreza en proyectar los “flujos libres de conciencia”, (y también la inclusión de múltiples narradores o puntos de vista y los saltos en el tiempo dentro de la narración) se le debe al norteamericano William Faulkner (1897-1962) . Pero su mundo es el “sur profundo” (de Estados Unidos), primitivo y brutal. Funda el condado ficticio de Yoknapatawpha, que en El ruido y la furia (1929)es el escenario de la degradación de una familia, los Compson. Parte del relato está contado desde la conciencia de Benjy, retrasado mental, en el que dicen es uno de los intentos más serios de reproducir los pensamientos de una conciencia enferma. En Palmeras salvajes (1939) una pareja llega al condado, ante el recelo de los lugareños.

En fin, casi todo lo que de realmente innovador dio el siglo cabe en estos nombres, aunque se podrían añadir un sinnúmero que completan estas teorías Quizás el último gran movimiento fue el llamado “realismo sucio” cuya novedad estriba en un realismo que no evita ni lo sórdido (Bukovski y sus relatos de alcohol y sexo) ni lo cotidiano (Carver o Tobías Woolf). Sin duda Carver es el gran maestro con sus breves relatos que atrapan a la gente común. …………

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